Hay gente que siempre anda buscando cómo sacar provecho de algunas situaciones. Fue el caso de un tipo que no se le ocurrió nada mejor que patentar el apellido de Felipe como una marca de artículos deportivos, a tan solo un par de semanas de la muerte del animador.
Por suerte, la familia reaccionó a tiempo y esta vez la justicia no fue ciega, porque prohibieron que la ya creada sociedad “Camiroaga Sport Spa”, empezara a funcionar.
De acuerdo a declaraciones del abogado de la familia: «ellos no han evaluado utilizar la imagen ni la marca de Felipe Camiroaga y, en consecuencia, no tiene marcas registradas a su nombre». Simple y claro.