Chile entero se conmovió luego de conocer el dramático caso de la joven Yuliana Acevedo, colombiana que murió descuartizada por su propia pareja, Edwin Vásquez, y cuyos restos aparecieron flotando en bolsas de supermercado por todo Santiago.Y aunque los detalles son escabrosos, lo cierto es que detrás del horrendo suceso, había un historia de amor marcada por el esfuerzo y sacrificio entre ambos jóvenes. ¿Cómo partió todo?
Según datos que ha recabado la PDI, ambos jóvenes se habrían conocido en Colombia, y habrían decidido venir juntos a Chile, hasta donde llegaron a fines del 2015. Vivían juntos en un pequeño departamento en Providencia, donde a puerta cerrada, se escuchaba que algo no andaba bien.
Resulta que en la intimidad de su hogar, eran recurrentes las peleas que ambos tenían por los celos de él, que pensaba que Yuliana le era infiel. Y así como varios de los vecinos escucharon muchas veces las peleas, sin hacer nada al respecto, todos pensaron que la tragedia algún día se desataría.
Y así ocurrió: Fue en el mismo departamento que compartían en Providencia cuando, tras una fuerte discusión, Edwin la estranguló hasta matarla. Luego de eso, sabiendo que estaba perdido, decidió cortarle las extremidadees con un cuchillo carnicero, pero de manera profesional.
Antes de cortar sus extremidades realizó torniquetes, cubrió los cortes con agua con sal para finalmente envolverlos con ropa. Luego de eso, Edwin puso los restos en una maleta en dos viajes para ir a tirarlos al río.
Fue así como, agobiado por la culpa, Edwin confesó a su jefe que había cometido el crimen, y fue éste quién lo convenció de confesarse. Detalles de una historia de amor que terminó en tragedia.