A los padres, en general, les complica cuando una hija comienza a pololear por miedo a que le hagan daño o solo la utilicen; porque ellos fueron adolescentes y actuaron o vieron a sus amigos actuar mal con una mujer, con el fin de validarse, temen que la historia se repita con su hija.
Pero, al parecer, no es tema para Rafael Araneda, quién se tomó con mucha calma al enterarse que su hija de 12 años pololea.
“La verdad es que no tengo nada que decir al respecto ¿Sabes por qué? Porque la última vez que yo inocentemente respondí tuve un problema con la Martina (15) y tampoco he conversado más con la Florencia”, contó en el matinal.
Y agregó que su hija le contó porque hay confianza, tanto así que le da lo mismo que lo molesten por el tema, porque sólo le importa que sus hijos sean felices.