Skip to main content

“No quiero estar cerca de malas personas, y ustedes lo son”: La desgarradora carta de un niño que sufrió bullying en su colegio

Su madre contó la historia detrás de la carta que escribió el pequeño.

El martes pasado se dio a conocer el conmovedor caso de un niño de 12 años, quien durante muchos años debió soportar el bullying de sus compañeros de colegio.

Todo comenzó cuando su mamá, Paola Givovich, inscribió al pequeño al Colegio San Ignacio de Alonso Ovalle, en Santiago. Aunque nunca pensó que su hijo ahí sería blanco de bromas y acoso de sus compañeros. El niño al no poder soportar los comentarios que recibía le rogó a su mamá que lo cambiara de establecimiento.

Paola contó que las agresiones comenzaron a aumentar en los últimos dos años. “Lo que más lo empezó a afectar fue cuando le decían ‘tú no tienes papá, huacho’. Un día me llamó llorando desconsolado para la semana del colegio, me dijo que un compañero le preguntó ‘¿qué se siente saber que no tienes papá, que eres un huacho?’“, dijo la mujer.

Y aunque la mamá del niño se acercó muchas veces al colegio para averiguar qué sucedía, el establecimiento nunca aceptó la gravedad de la situación. “Fui miles de veces a hablar al colegio y ahí no reconocían la violencia, me decían que no había violencia escolar”, contó Paola a La Cuarta.

Fue tanto el bullying que sufrió el niño, que hasta pensó en suicidarse. “Él se quería matar y hacerlo dentro del colegio. Estaba escondido en un baño de unos compañeros y tuvo la idea de quitarse la vida. Ya no quería más”, dijo la mujer.

Además el niño sufrió aislamiento después que la psicóloga hiciera una reunión con los compañeros que lo molestaban para que le pidieran disculpas. Luego de la cita los demás compañeros decidieron hacerle la «ley del hielo», para así no tener problemas con el grupo que le hacían bullying.

Fue ahí cuando Givovich y su hijo decidieron salirse del colegio. “Su psicólogo me dijo que lo sacara, que ya era muy peligroso que siguiera, él estaba con depresión, pánico nocturno; un niño de 12 años tomaba antidepresivos, ansiolíticos”, contó la mujer.

Luego de tomar la decisión, la directora del establecimiento les recomendó que antes de irse el niño se despidiera de sus compañeros, para que cerrara la etapa. «Y ahí surge la carta que escribió él y la leyó a todos sus compañeros, diciendo lo que sentí y por qué se iba”, agregó la madre.

“Hoy vengo a terminar un ciclo muy doloroso para mí, ya que ustedes me han hecho pasarlo muy mal en el curso, con las constantes agresiones de los que se creen bacanes“.

“Me voy porque mi madre y yo lo decidimos, no quiero estar cerca de malas personas y ustedes lo son. Me han ofendido con cosas muy dolorosas, como que no tengo papá, pero cualquiera quisiera tener la gran madre que tengo. Me han dicho que todos me odian pero están equivocados, hay mucha gente del colegio que me quiere y por ellos me da pena irme, pero ustedes causan mucho dolor”.

“Con pena les digo que el colegio no supo cuidar mi integridad. Al resto, ojalá le vaya bien y se den cuenta que no deben callar por un grupo de matones, miren de frente la vida y sean valientes que la injusticia debe ser denunciada y ustedes pueden hacerlo, dejen de tener temor”.

Ahora el niño comenzó séptimo básico en otro colegio, donde por suerte no ha tenido que pasar malos ratos. Y Paola tomó la decisión de denunciar al Colegio San Ignacio por indemnización de perjuicios ya que no siguieron los protocolos contra el acoso.

Contenido patrocinado