Picasso es el nombre del perrito que fue salvado por un grupo de rescate de animales, quien al ver al can se enamoraron por completo de él.
El perro de apenas 10 meses sufre de una deformación facial que lo hace diferente a los otros animales. Y además de mala formación, el can no ha tenido buena suerte, ya que estuvo a punto de recibir una inyección fatal.
Todo empezó en California, Estados Unidos, cuando su dueño, un criador de perros, lo dejó en un refugio llamado Porterville Animal Shelter junto a su hermano. Y debido a que las mezclas de pitbull y terrier no lograron ser adoptados por una familia, el hombre decidió llevarlos al lugar mencionado anteriormente, en donde después de un tiempo los cachorros iban a recibir una inyección fatal para matarlos.
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Pero por suerte no recibieron la inyección, ya que de acuerdo a la información entregada por Huffington Post, una mujer llamada Liesl Wilhardt, de la fundación Luvable Dog Rescue, supo sobre la existencia de los perritos, así que fue a salvarlos.
“Le pregunté si tenía algún perro con necesidades especiales, porque pensé que podríamos llevarnos alguno“, dijo Liesl, quien aseguró que se encariñó de inmediato de los animales y quiso salvarlos.
Picasso, quien no tiene problemas de salud, será sometido a una operación facial para enderezar su dentadura y luego será dado en adopción.
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