Joshua Horner fue acusado de abusar sexualmente de su hija menor de edad. Sin embargo, la aparición de su mascota cambió todo el escenario.
En abril de 2017, Joshua Horner fue condenado a 50 años de cárcel por un tribunal de Oregon, Estados Unidos, acusado de abusar sexualmente de su hija menor de edad.
El hombre pasó 18 meses en prisión hasta que Lucy, su perra perdida, apareció y lo salvó de pasar décadas tras las rejas.
En su declaración, la hija de Horner dijo que su padre había matado a la perra con la intención de intimidarla para que no denunciarla la supuesta violación, según señala el Washington Times.
Mientras estaba en la cárcel, el hombre se contactó con la organización Oregon Innocence Project que empezó la búsqueda de lucy. Finalmente encontraron al animal a 300 kilómetros de su casa.
La aparición de Lucy echó por tierra la versión de la hija de Horner. El juez desestimó la versión de la niña al considerar que había mentido bajo juramento y pidió liberar a Joshua.
«Este es un día que no estaba seguro de que iba a ver. Hoy salgo de aquí como un hombre libre», dijo el hombre tras dejar la prisión.
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