Durante la jornada de este martes se conoció el caso de Tania Cea, mujer de 20 que tras someterse a una abdominoplastía y liposucción en la Clínica Acuario, murió luego de sufrir un paro cardiorrespiratorio en su post operatorio.
Quien era madre de dos niños (uno de un año y otro de cuatro) se había casado con Javier Barrientos, joven de 21 años, en noviembre del año pasado.
Ambos estaban esperando realizar en abril su luna de miel en Estados Unidos, motivo por el que Tania decidió realizarse esta operación.
«Nos conocimos hace 6 años en los juegos de una plaza. Era mi primera polola y yo el de ella. Estoy destrozado, no sé cómo explicárselo a mis hijos«, dijo Barrientos al diario La Cuarta.
La joven madre había pagado en efectivo los cuatro millones que salía la operación, gracias a las buenas cuentas que sacaba con su pareja en la botillería que tienen en San Bernardo. «Solo queremos que esta clínica reciba una sanción, ya que no es posible que siga muriendo gente«, agregó Barrientos.
A parte de este fatal caso, han salido otros testimonios de mujeres que también han tenido complicaciones graves a raíz de operaciones realizadas en la clínica ubicada en Providencia: Paola Chaparro se hizo tres operaciones en Acuario, de las cuales tiene muy malos recuerdos: «Me fallaron los signos vitales y estuve en el mismo riesgo de la chica que falleció«, dijo a T13.
«Cortaron tanta piel que no pudieron juntarla. Entonces, subieron el pubis, lo que me trajo problemas a nivel urinario y sexual, porque estaba desencajado todo», detalló Chaparro.