Esta semana se viralizó un video en el que aparece el Papa Francisco siendo saludado por una gran cantidad de feligreses. Lo curioso de la escena es que el Sumo Pontífice retira su mano en reiteradas ocasiones para evitar que las personas le besen el anillo.
La imagen generó extrañeza entre los usuarios de las redes asociales, quienes compartieron el registro por la web y no bastó mucho tiempo para que se convirtiera en tendencia mundial.
Ante las dudas que generaba el video, periodistas consultaron al Vaticano la razón de la curiosa reacción del Papa. «Fue una simple cuestión de higiene», Alessandro Gisotti, vocero del Vaticano, según indica Clarín.
«El Papa estaba preocupado por la higiene y por contagiar los gérmenes entre la gente que hacía la fila para besarlo en el mismo sitio. El Papa me dijo que le gusta abrazar y ser abrazado y estar cerca de la gente pero temía que todos se enfermasen», señaló Gisotti
Cercanos al Papa señalaron que no quería propagar gérmenes, por eso evitó que le besaran el anillo. Sin embargo, Gisotti aseguró que al Sumo Pontífice «le divierte» la polémica que se creó en torno al video.