El hecho de cansarse con tan solo viajar de la casa al trabajo y de este al hogar puede resultar frustrante y aportar en el estrés del día a día. Y es que el Consejo de Desarrollo Urbano reveló cuánto demoran los santiaguinos en llegar a sus lugares de trabajo o estudio en el transporte público durante la horario punta en Santiago.
Según publicó La Tercera, los datos reflejan que ninguna de las comunas de la capital cumple con el indicador sugerido de hasta 60 minutos si se considera al 10% de su población que más tarda.
Los que más se demoran provienen de las comunas de Quilicura (120 minutos), Lo Espejo (120), La Pintana (120) y San Bernardo (117).
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Por otro lado, los desplazamientos más expeditos se dan en Providencia (70 minutos), Conchalí(75), Ñuñoa (75) y Las Condes (75), sin embargo, tampoco logran dar con el estándar.
El mismo rotativo reveló que los trabajadores de la construcción registran los mayores tiempos de viaje (65 minutos en promedio), casi el doble de lo que se demoran gerentes de empresas (34 minutos).
Los resultados apuntan a que los chilenos de altos ingresos demoran menos en sus traslados, lo que se explica principalmente por su fácil acceso a otros medios de transporte (autos particulares, taxis o plataformas).
Esto claramente se contrapone con la idea del ministro del trabajo Nicolás Monckeberg, quien en entrevista con radio La Clave señaló que los trabajadores debiesen ingresar más temprano para poder llegar más rápido al trabajo.
“Por ejemplo, si usted le exige a todos los trabajadores llegar a las 9 de la mañana a la pega, eso va a implicar que la mayoría de ellos van a tener que levantarse a las 6 de la mañana, y una hora y media de taco o de locomoción colectiva. Si ese trabajador en vez de las 9 de la mañana llega a las 7.30, se va a demorar 20 minutos a la pega y va a llegar a su casa por lo menos una hora y media antes, porque no se va a ir a la hora del taco”, dijo.