Tomando el nombre de «Giovany Arévalo Álvarez», un carabineros se mantuvo infiltrado en la población Lo Hermida, manteniéndose activo en las organizaciones que se realizan entre la comunidad, como ollas comunas y protestas.
Según lo reveló un reportaje de Ciper, el funcionario policial comenzó a acercarse a una organización social por medio de un perfil de Facebook donde se nombraba «Charlie Charlie». Luego pasó a comunicarse por chat, pidiendo reunirse con dirigentes para ayudarlos; y en paralelo, llegó a tatuarse con un vecino del sector, al que contactó por Instagram.
A Lo Hermida llegó contando que participó en la «primera línea» de Antofagasta durante las manifestaciones del estallido social, y afirmaba que quería enfrentarse «con los pacos». De hecho, uno de sus planes más atrevidos fue realizar un ataque sorpresa a la subcomisaría de Lo Hermida, que quedó registrado en un audio que envió él a un vecino. «Hay que quemarlos», dijo incluso en una oportunidad.
Y aunque sus relatos y acciones eran coherentes, los vecinos comenzaron a sospechar de «Giovany» por su insistencia de enfrentarse con Carabineros, sus constantes aportes monetarios para las ollas comunes, no contaba con amigos en el sector y, luego de una reunión para coordinar el aniversario de la población, lo vieron sacando fotos a las patentes de los autos de asistentes a ésta.
Protagonista de un docureality
Todas estas dudas terminaron cuando una vecina de la población, quien conocía a «Giovany», tuvo una urgencia médica.
Mientras esperaba su atención, la mujer vio en el televisor de la sala del recinto asistencial precisamente al hombre que participaba de ollas comunes, pero vestido con el uniforme de Carabineros y participando de un capítulo de un docureality de Canal 13.
La joven advirtió que aparecía «Giovany», con otro nombre (el cual era su nombre real) y con una apariencia diferente: Tenía pelo corto y no las trenzas con las que se infiltró en la organización social; incluso en su nuevo rol lucía trenzas azules, bigote, barba tipo candado, un aro con expansión en su oreja y, después de junio, un tatuaje en su brazo alusivo a las protestas sociales.
Como lo que vio la joven se trataba el anuncio de un capítulo repetido del docureality de Canal 13, según informó Ciper, Carabineros le solicitó a la señal privada que no lo volviera a emitir.
Lee también: Aprobación a Carabineros tiene su mayor baja desde el estallido social
Los vecinos de Lo Hermida se sienten preocupados por este caso y el constante hostigamiento y seguimiento que han tenido por parte de policías.
«Nos sentimos amenazados también, por el constante hostigamiento de la policía (…) Es como que quisieron inducirnos a participar en actividades provocativas, para inculparnos. Creo que uno de sus objetivos era que engancháramos con alguna de sus propuestas, como cuando nos propuso hacer una emboscada contra Carabineros. Y después nos podían hacer un montaje y presentarnos como los violentistas de Lo Hermida», señaló uno de los dirigentes a Ciper.