Las mascarillas se han convertido en uno de los artículos más esenciales para nuestro diario vivir, pues cada vez que salgamos, tenemos que tenerlas para cuidarnos. Es posible encontrar estos protectores faciales en diferentes materiales, como lo son los de tela y, también los quirúrgicos, aunque uno de ellos está causando polémica por estos días.
Y es que en Europa, específicamente en Alemania, se prohibió el uso de las mascarillas de tela. «No es momento de bajar la guardia y es necesario actuar ahora contra las mutaciones del virus, especialmente la detectada en Reino Unido», fue lo dicho por Angela Merkel sobre esta restricción. Desde la semana pasada comenzó a regir el uso obligatorio de las mascarillas quirúrgicas o las FFP2, según informa ABC.
Pero esta medida despertó la alerta de la población mundial. Hay que recordar que uno de los implementos más utilizados son las mascarillas de tela, pues su reutilización le entregan una ventaja por la accesibilidad que tienen.
Por esto, muchos se preguntan cuáles son las diferencias entre los artículos médicos y esto te detallaremos a continuación.
Las principales diferencias de las mascarillas de tela y las FFP2
Las mascarillas FFP2, que son las que ahora deben ser utilizadas en Alemania, se destacan porque, además de filtrar el aire exhalado, también filtran el aire inhalado. Pero en adición a eso, uno de sus requerimientos es mantener fuera el 94% de los aerosoles de prueba, que son partículas líquidas muy finas.
Según DW, el virólogo alemán Alexander Kekulé indica que con una mascarilla FFP2, el riesgo de infección se reduciría significativamente. «Una mascarilla FFP2 es mucho más segura que una común, que a menudo se lleva muy suelta. Especialmente en el transporte público, mucha gente se amontona en un espacio reducido», indica.
Es importante precisar que para la Organización Mundial de la Salud (OMS), las mascarillas de tela sí son efectivas. Además, detallan que como el modo de contagio es el mismo, siguen siendo eficaces en el caso de transmisión de la cepa británica.
Por esto mismo, y según indicó Maria Van Kerkhove, responsable de la gestión de la pandemia en la OMS, no existirán modificaciones en cuanto a lo que la institución recomienda.
«Todas las personas de menos de 60 años que no tengan problemas de salud particulares pueden usar las mascarillas de tela, no quirúrgicas», dice la autoridad sanitaria.