Hace ya unos meses, la brasileña Daniela Colett aseguró que su relación con el futbolista Eduardo «Edu» Vargas había llegado a su fin.
Todo esto ocurrió durante la breve polémica del «peluquerazo», cuando selección disputaba los duelos de la reciente Copa América en Brasil. Aunque según fuentes el quiebre de la relación venía de antes.
También te puede interesar: Salen a la luz fotografías de la relación entre Marité Matus y Camilo Huerta
Pero tras los últimos partidos eliminatorios que jugó la selección, el Edu tuvo unos días libres que aprovechó de pasar en su casa de Belo Horizonte, Brasil, acompañado de sus tres hijos y la propia Daniela.
Leer también:
¿Volvieron? La sensual foto de Eduardo Vargas con Daniela Collet
"En su cuenta de Instagram, Eduardo Vargas encendió los rumores de una posible reconciliación amorosa con la modelo Daniela Collet."
Incluso, en aquellos días de piscina y juego, el futbolista puso durante un rato una foto de perfil (Instagram) en que aparece con Daniela Colett. Fueron esos gestos los que desataron rumores sobre un supuesto regreso de la pareja.
Ahora que ya han pasado algunas semanas desde esa foto, fue la propia Daniela Colett quien salió para aclarar cuál es la situación actual entre ambos.
Todo se derrumbo para Daniela y Edu
Fue a traves de Instagram, que los seguidores de Daniela le hicieron múltiples preguntas de «verdad o mentira» sobre distintos temas, en que ella respondió por escrito. Así fue cómo su vínculo con «Turboman» salió a colación.
«¿Es verdad que siempre vuelven y terminan con Varguitas?», escribió un seguidor.
Ante eso, ella respondió que es «mentira», porque «la mayoría de las veces son especulaciones que ustedes mismos tienen».
Aun así, tras esas palabras, otro usuario fue más directo: «¿Es verdad que sigues con Eduardo?»
A lo que ella respondió con un claro: «Mentira», dejando en evidencia que no están juntos.
Por último, la otra pregunta fue: «¿Es verdad que te incomoda que te hagan preguntas relacionadas con ‘Edu’?»
A lo que ella contestó que era «mentira», porque «él hace parte de mi vida y tenemos tres cositas en común», haciendo alusión a los pequeños hijos de la expareja.
