Utilizando como medio la película Mensajes Privados del director chileno Matías Bize, el actor nacional Nicolás Poblete denunció abusos sufridos en su infancia. Acorde a lo comentado por el actor, él y su hermana fueron abusados por su tío, el psiquiatra Alfredo Pemjeam.
El psiquiatra, quien resulta ser tío político de Nicolás Poblete, «Les diagnosticó enfermedades psíquicas y les arruinó la vida», según el actor reveló a EFE. Además, aseguró que: «Yo tuve crisis de pánico desde los 9 años hasta los 33, cuando supe por qué tenía este síntoma que no entendía. Jamás lo quise contar para sentirme condescendido por el resto de la gente, sino que no lo podía seguir guardando», expresó.
Sobre Alfredo Pemjeam, Nicolás Poblete comentó: «Fue un tío político, casado con la hermana de mi papá, Alfredo Pemjeam, un psiquiatra afamado en Chile, que siempre ayudó mucho a la familia. Nos hizo creer que teníamos un problema mental nosotros, para tapar su abuso», contó.
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Cómo Nicolás Poblete enfrentó el abuso
Luego de muchos años, Nicolás Poblete dijo que: «Empecé a buscar abogados y otras personas abusadas, pero no querían denunciar; cuando yo fui padre, me di cuenta. Cuando eres muy niño y te suceden estos abusos, el cerebro los bloquea hasta que tu tengas un ambiente que sea capaz de contener esa verdad, entonces, brota, porque tienes un lugar de contención, que en mi fueron mi pareja y mi hija», detalló.
Además, Nicolás Poblete agregó: «No lo conté a nadie, ni le grité a Chile quién era esta persona, me lo guardé durante años y él, que se cree tan brillante, que creyó que escondería su crimen haciéndonos creer a mi hermana y a mi que teníamos un problema en la mente durante 35 años. Además de haber hecho lo que nos hizo a mi hermana y a mí cuando éramos niños, si se creía inteligente, se encontró con un toro acá», puntualizó.
Hoy, el actor Nicolás Poblete es padre y asegura que perder a su hija por dos minutos le ocasiona que «Se muere de miedo». Y afirma que «Eso no puede ser. Algo tenemos que hacer como sociedad, hay que atreverse a hablarlo, uno no es un superhéroe», cerró.