Durante muchos años, para la comunidad LGBTIQ+ era solo un sueño poder consolidar el matrimonio igualitario en Chile. Luego de múltiples luchas y años de espera, se ha garantizado que todos puedan acceder al matrimonio en nuestro país. Luego de entrar en vigencia la ley, hoy se llevó a cabo el primer matrimonio igualitario en Chile.
En esta instancia, Javier Silva y Jaime Nazar acudieron al Registro Civil a horas de la mañana para casarse. Si bien ambos ya contaban con un Acuerdo de Unión Civil, este no cubría por completo los derechos de sus dos pequeños hijos. Ya que en el caso del fallecimiento de alguno de los padres, no se garantiza custodia inmediata al otro, entre otros derechos de los niños.
A raíz de esto, Javier y Jaime oficializaron su relación de 7 años en Providencia. Al evento asistieron incluso autoridades ministeriales, como el ministro de Justicia, Hernán Larraín y la subsecretaria de Derechos Humanos, Lorena Recabarren.
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El primer matrimonio igualitario en Chile
Para comenzar la ceremonia, la testigo presente dedicó unas palabras a la pareja: «Primero que todo, gracias por hacerme testigo de esta unión. Para todos los que conocemos a Javier y Jaime, es el cúlmine de lo que entendemos por amor. Tienen una de las familias más linda que conozco. La mejor felicidad para ellos y gracias por hacernos partícipe de esto», cerró.
Luego de esto, la persona encargada de oficiar la ceremonia de matrimonio igualitario señaló: «Y como la ley me autoriza, y como quiero hacerlo junto a ustedes dos, los quiero declarar ¡casados!», dijo por primera vez en nuestro país a una pareja homosexual.
Momentos después de la ceremonia
Después de este emotivo momento, Javier Silva comentó: «Siendo padres vimos que era necesario este cambio en la ley porque el acuerdo de unión civil no protegía a nuestros hijos en el sentido de que si alguno fallaba, el que no es padre biológico no tenía ningún tipo de custodia. Somos familia que existimos y nuestros tres hijos estaban en desventaja frente a los demás, esto era necesario», expresó.
Por su parte, su esposo Jaime Nazar complementó: «Es increíble saber que nuestra familia, nuestros hijos, no tienen nada que temer, que son iguales ante la ley como los hijos de nuestros vecinos, que podemos optar a los mismos derechos, sin sentir que se nos cierre una puerta», cerró.