Protagonista de la época dorada de la farándula nacional. De hecho, en un momento donde las figuras argentinas se tomaban los programas y realities, la modelo chilena Romina Salazar logró mostrar todos sus atributos dentro de las diferentes polémicas y plataformas de ese entonces.
Sin embargo, la figura tomó una drástica decisión y realizó un importante cambio en su vida.
¿Los motivos? Ingresó a estudiar derecho en la Universidad de Talca y en eso del año 2016-2017 se tituló como abogada.
Tras jurar frente a la Corte Suprema, Romina Salazar trabajó como asesora para deudores.
E incluso, el año 2018 se desempeñó como abogada de la Municipalidad de Santiago.
Sin ir más lejos, luego de su destacado tabajo, la exchica de la farándula nacional trabajó el año 2019 en el Ministerio de Agricultura y el 2020 en el Ministerio de Previsión Social. ¡Seca!
Así, a finales de ese mismo año Romina Salazar se «lanzó a la pista» y fundó su propio proyecto denominado “Libre de Juicios”.
Es en esta empresa donde la exmodelo y un equipo de siete abogados buscan ayudar a las personas que tienen problemas de deudas y riesgo de embargo.
Del mismo modo, hace algunas horas la destacada abogada de 37 años conversó con el diario LUN y detalló cómo es su nueva vida.
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Romina Salazar y su nueva vida como destacada abogada
Actualmente alejada de las pantallas, Romina Salazar comentó de entrada que es “otra vida”:
«Es realmente otra vida (…) Yo hago de todo, pero lo que más me gusta hacer es entrevistar a los clientes, evaluar sus casos y darles una estrategia de lo que se puede hacer y lo que no se puede hacer», explicó.
En cuanto al objetivo de “Libre de Juicios” detalló lo siguiente:
«El tema de las deudas es súper complejo para quien lo vive, súper angustiante. Por eso hay que tener empatía, generar sesiones personalizadas y ser dedicada con los clientes. A veces los escucho como si fuera yo también una sicóloga. Las personas que llegan a mí vienen con mucha angustia, muchas deudas y problemas varios. Son personas que están viviendo presiones de los acreedores, llamados insistentes de las casas de cobranza, amenazas de remates, etc».
Además, detalló lo importante que es para ellos transmitir claridad a sus clientes:
«Los clientes desconocen los procedimientos, y colapsan cuando les plantean la alternativa del embargo, ya que ven que todo lo que han conseguido con tanto esfuerzo puede desaparecer. Lo primero que necesitan es alguien que los escuche, transmitir tranquilidad y una solución».
Finalmente y pese a mantenerse alejada de las fotos y eventos para lucir su figura, Romina Salazar reveló que entrena diariamente al menos una hora:
«Hacer ejercicios es salud y ahí me monitorean kinesiólogos, nutricionistas y traumatólogos. Me encanta verme bien, que me pregunten cómo hago para tener tanta energía o que me pidan asesorías para definir los abdominales. Eso me motiva un montón. Sin ejercicio creo que no podría dedicarme bien al trabajo, es una mezcla», sentenció la destacada abogada.