El reconocido animador de CHV, Jean-Philippe Cretton, sorprendió a sus seguidores tras compartir una sentida reflexión.
De hecho, a diferencia de otras figuras públicas, que no suelen mostrar su lado más íntimo o sus momentos “bajos”, la pareja de Pamela Díaz siempre ha sido transparente con sus sentimientos e incluso su estado de salud emocional.
En esta línea, el comunicador publicó un sentido mensaje en su cuenta de Instagram, plataforma donde tiene más de 952 mil seguidores.
«Ando reflexivo por estos días. Más de lo ya habitual.
Tengo 38 y siendo aún joven, siento los pasos de la edad. Los escucho en mi silencio y los abrazo como un niño.
Las arrugas en mi cara trazan el mapa de mi propia existencia.
Una verruga en mi nariz me recuerda que, poco a poco, me transformo en el brujo que me trajo hasta aquí. Aquel que guía mis pasos con infinita templanza. Confiando en mí y yo en él. Vamos sin arnés.
Me doy cuenta que envejezco y con ello, asumo y valoro lo que he sido y soy», comenzó señalando.
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Jean-Philippe Cretton y su sentido mensaje
«Soy el mismo niño solitario que alguna vez fui, jugando en el bosque que sugería mundos insondables.Ahora, camino tranquilo por otros bosques deslumbrado de cómo insectos y aves, se configuran entre añosos árboles testigos de la historia. Eso me hace feliz».
Sin embargo, luego de esto, el animador de CHV también explicó en la publicación que tiene una relación especial con la soledad:
«Soy algo ermitaño. Me gusta el silencio y el estado que trae consigo después de experimentarlo por días, pero más me gusta poder compartirlo.
Con los años me cuesta más «La Sole». Es cierto. Me doy cuenta, pero ¿Qué habría sido de mi sin ella?
Me doy cuenta de que la ciudad y sus presiones, me hacen mal. Me cuesta cada vez más con los años. Yo no soy de ahí, pero lo asumo con tranquilidad, paciencia y agradecimiento.
Me gusta vivir, pese a mis sombras. No, corrijo. Me gusta vivir gracias a mis sombras, que hacen hoy de mi este hombre más viejo capaz de disfrutar lo simple. Incluso, cuando se entorpece.
Me gusta vivir, pero mientras más viejo, me gusta vivir a mi ritmo. Como mis canciones, lentas y oníricas.
Me gusta en lo que me he convertido, porque siento que he sido un hombre bueno.
Me está gustando hacerme viejo», concluyó.