¿Eres de las personas que besan a sus animales? Si es así, te contamos que hay razones por las que deberías dejar de hacerlo.
Para muchos las mascotas son parte de sus familias y por ende les entregan el afecto que le corresponde a un miembro de esta.
Es tanto el cariño y amor que les tenemos, que buscamos una maneras de demostrar el afecto que les tenemos.
Pero según expertos, es recomendable dejar de lado la práctica de besarlos.
En pudahuel.cl te entregamos la razones del porqué dejar de hacerlo.
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Motivos por los que debes dejar de besar a tus mascotas
En primer lugar es importante recordar que las mascotas portan bacterias, por lo que al besarlos, esos microorganismos pueden pasar a nuestro cuerpo.
Tener estas bacterias en el cuerpo puede generar la transmisión de infecciones, las que se denominan enfermedades zoonóticas o zoonosis.
Estas enfermedades pueden transmitirse, según expertos, por el contacto con saliva, fluidos corporales o heces.
En el caso de los perros y los gatos, son considerados «reservorios importantes de infecciones zoonóticas, lo que significa que los patógenos viven naturalmente en su población«, mencionan académicos australianos.
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Los gatos pueden contagiar infecciones a través de rasguños y mordeduras.
Por su lado, los perros suelen portar bacterias en su saliva y boca, lo que pueden provocar la transmisión de estas a personas cercanas.
Hay un público que tiene mayor tendencia a contraer estas infecciones.
Adultos mayores, niños, embarazadas y personas con un sistema inmune débil son los mayores candidatos.
Recomendaciones
Los expertos dedicados al estudio de los animales y las enfermedades, hacer una serie de recomendaciones para prevenir cualquier tipo de bacteria de origen animal.
Por ejemplo, lavarse las manos luego de jugar con las mascotas, al manipular su ropa de cama o juguetes e incluso sus heces, puede ser una buena práctica.
Evitar los lamidos o que toquen heridas en distintas partes del cuerpo, es primordial.
Se recomienda usar guantes al cambiar cajas de arena en el caso de los gatos.
Supervisar a los niños cuando juegan los niños con las mascotas y procurar que se laven las manos posteriormente.
Finalmente, dentro de lo posible mantenerlos fuera de la cocina.
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