Una emotiva entrevista compartió nuestro querido animador del «Cuéntamelo Todo», Rafael Araneda con el diario LUN hace algunas horas.
¿Los motivos? En la conversación, el mítico comunicador chileno, que actualmente se encuentra radicado en Miami, conversó sobre la experiencia de vivir la crianza de su hijo Benjamín.
Cabe recordar, que el más pequeño del clan Araneda, fue adoptado cuando tenía tan solo unos meses de edad en Haití.
En esta línea, tanto para Rafa como para su esposa, Marcela Vacarezza, resultó ser toda una nueva experiencia el asumir la responsabilidad de criar y educar al pequeño Benjamín.
Asimismo, recordemos que el clan Araneda, tiene tres hermanos además de «Benjita», Vicente de 17 años, Florencia de 20 años y Martina que hace poco cumplió los 22 añitos.
Fue en este contexto, que Rafael Araneda conversó con el citado medio sobre el proceso de criar a Benjamín y cómo se siente actualmente con su paternidad.
Lee también: «Hicimos una fonda»: Rafael Araneda y Marcela Vacarezza se lucen representando a Chile en Estados Unidos junto a uno de sus hijos
«Me cambió la vida»: Rafael Arenda se sincera sobre la etapa de criar a su hijo Benjamin
Por su parte, Rafa comenzó revelando que la crianza de Benjamín le devolvió varias energías:
“A mí me cambió la vida para bien. Aumentó mi energía, las ganas, las alegrías. Creo que es una muy buena receta para tener energía…Uno se siente más vital. Tengo más metas, más vitalidad, siento que tengo que ayudarle a cumplir sus objetivos.”, sostuvo de entrada.
Incluso, el animador del «Cuéntamelo Todo», confesó que él mantuvo una distancia similar de edad con su padre, de casi 50 años.
“Mi padre tuvo una diferencia de edad conmigo similar a la que yo tengo con Benjamín. Él fue súper presente conmigo, un tremendo padre. Creo que lo único que le faltó en su época tal vez fue participar más de las actividades deportivas conmigo… Y yo creo que eso es clave, darles tiempo a los niños”.
Finalmente, el popular comunicador sostuvo que actualmente dentro de su rutina diaria es ir a dejar a su hijo en bicicleta o compartir los días sábados en la cancha de fútbol. ¡Los queremos mucho!